Intensa jornada la vivida hoy en los mercados. Por momentos, nos vinieron a la memoria aquellas sesiones alocadamente bajistas del año 2.008, salvando las distancias, claro está. Al cierre, las sensaciones que nos quedan pasan básicamente por el hecho de que aún faltan motivos técnicos en los gráficos para un cierre generalizado de posiciones compradoras.
El futuro del S&P 500, en una visión cortoplacista, mantiene intacto no sólo el lateral en el que se mueve en el muy corto plazo, sino también la directriz alcista nacida en noviembre.
El contado del Nasdaq 100, en una visión de medio plazo, mantiene al cierre esa directriz alcista nacida en marzo, que no es poco. Es evidente que hace ya meses que el precio no frecuenta la parte alta de ese canal azul, lo que eviencia una desaceleración de la tendencia alcista, pero no en modo alguno su final.
El cfd sobre el Ibex 35, que ha marcado en el intradía mínimos en los 11.637 puntos, ha conseguido cerrar 120 puntos por encima de ese nivel. Podría decirse que virtualmente se ha tocado la parte baja de ese canal lateral-alcista que definen las líneas verdes del gráfico. Estaríamos ante un típico movimiento dentro de ese proceso de lateralización del mercado que venimos viviendo. Por cierto, una curiosidad: las tres últimas sesiones en las que el precio ha tocado esa parte baja del canal verde han coincidido con las de mayor rango diario (diferencia en puntos entre los mínimos y máximos intradiarios). Hoy han sido más de 400 puntos, el 27 de noviembre fueron más de 500 puntos y el 30 de octubre casi 600.
En conclusión, no se ha roto nada importante, aunque todo se encuentre en el límite de la rotura. O lo que es lo mismo: que el mercado está para no perderlo mucho de vista, ya que puede producirse una señal importante. Lo que está por ver es en qué sentido será.
Seguiremos los acontecimientos.